¿Y ahora qué?- Miguel Dorelo

¿Y ahora qué?-Miguel Dorelo

Otra de esas noches

En que la nada me acorrala.

No hay razones que justifiquen

Esta melancolía insoportable,

Este vacío gris,

Este dolor del alma.

¿Y ahora qué?

Si todo ya fue

Si nada ha cambiado.

Si,

Lo juro,

Ya no la extraño.

Miedos- Miguel Dorelo

Miedos- Miguel Dorelo

El principio:
La oscuridad y mi habitación.
Por favor,
No apagues la luz, mamá.

Después:
Un
Callejón oscuro,
Mirar
Una y otra vez por
Encima del hombro.

Luego:
Todas mis noches.
Insomnio.
No voy a dormirme,
El color negro
Es un inmenso pozo
Que amenaza con devorarme.

Raciocinio:
La oscuridad es tan solo
Ausencia de luz.
No me convenzo,
Allí hay algo, lo sé, estoy seguro.
Pero no me atrevo a mencionarlo.

Ya no más- Miguel Dorelo

Ya no más- Miguel Dorelo

Ya no más palabras dedicadas,
Ni patéticos intentos
De decir lo que no fue dicho
En pretéritos momentos
Ya lejanos en el tiempo y la distancia.

Basta ya de buscar
Entre adjetivos, verbos o sustantivos
La metáfora adecuada,
La frase que conmueva,
El mensaje que te acerque.

Ya no tengo ganas
Ni paciencia, por que negarlo,
De intentar utópicos porvenires de reencuentros,
De miradas francas,
De desanudar equívocos,
De improbables comprensiones.

Ya no más diálogos de uno
De preguntas sin respuestas
De oídos sordos y soberbios,
De labios irrespetuosos y sellados.

Ya no más.

El Pantano- Miguel Dorelo

El pantano- Miguel Dorelo

Te hundes.
Inexorablemente, lentamente, te hundes.
Tienes que agarrarte de algo, si no estás muerto.
Buscas ansiosa, desesperadamente, a que aferrarte.
(La orilla te parece tan lejana a veces).

Pantano. Vida.
Vida-pantano.
Buscas en el sentido equivocado y te hundes un poco más.
Vuelves a intentarlo. Todo es en vano.
Desesperado y confuso,
Ya sin esperanzas,
Comienzas a resignarte.

Reinsertándome- Miguel Dorelo

Reinsertándome-Miguel Dorelo

Hoy desperté con ganas de reinsertarme.

Vivir en el margen

Ya no me resulta atractivo,

Casi todas las cosas me quedan lejos,

Y las pocas que aún están

A mi alcance ya no me satisfacen.

Esto se está poniendo demasiado oscuro,

Y triste.

Un poco más de luz estaría bien.

Y también

Algunas risas,

Y una nueva ronda

De aquél juego que tan bien alguna vez jugamos

Y que tanto nos gustaba.

Hoy desperté con ganas de reinsertarme.

Quizás esté a tiempo.

Y a lo mejor aún no es tarde.

Desencuentro- Miguel Dorelo

Desencuentro- Miguel Dorelo

Tiempos
Conectados,
Con
Pieles
No compatibles
En
Lugares
Inadecuados.
Cuerpos reflejados
En
Espejos empañados,
En ausencia
De miradas.

Presencias
Apenas perceptibles,
Tenues, solitarias;
Sin luces
Ni
Sombras
Que cobijen
O
Acompañen.

Labios que
Ya
No besan,
Bocas
Que
Solo callan.
Un amague,
Dos
Que fueron
Una y uno;
Solitarias
Individualidades
Estancadas.

Tristeza
Y
Frustración
De no haber sido
Ni
El remedo
De
Una nada.

.

Otra de esas tardes- Miguel Dorelo

Otra de esas tardes- Miguel Dorelo

El gris queriéndose adueñar de todo,
De lo externo y de lo interno,
Entrando sin pedir permiso,
A lugares que no le corresponde

Atravesando prepotente las fronteras,
Aprovechándose de mis defensas indefensas
Por debajo de lo mínimo aconsejable.

Pero, no ha tenido en cuenta que
Los rojos,
Los azules, el verde
El naranja y los ocres
Aún resisten,
Atrincherados en el recuerdo
De tus ojos,
De tu boca,
Y
Del recuerdo del recuerdo
Del aroma y la textura
De tu piel y de tu pelo.

Vientos de cambio- Miguel Dorelo

Vientos de cambio-Miguel Dorelo

Todo parece calmo,
Lo que no fue
Y hasta lo que pudo haber sido.
Y sin embargo
Soplan vientos tenues,
Casi imperceptibles.
Vientos del poniente,
Aire enrarecido que confunde.
Pequeña brisa del ocaso,
Indefinida, pero aún molesta:
Todavía,
Y a pesar, presente.

Es hora de buscar cobijo,
O quizás,
Otras ráfagas,
Nuevas direcciones.
Vientos de cambio,
De olvido,
De ya no más,
De empezar de nuevo.

Poca cosa- Miguel Dorelo

Poca cosa- Miguel Dorelo

Ojos y labios.
Cadera,
Pechos y sonrisa.
Dedos,
Cabellos y orejas.
Tobillos,
Manos y voz.
Espalda,
Nariz y mirada.
Pómulos,
Pies y caricias.
Muslos,
Lengua y suspiros.


En estos días,
Extraño
Tan solo eso de vos.

Andenes de película- Miguel Dorelo

Andenes de película- Miguel Dorelo

Andenes

Con pañuelos húmedos,

En manos agitadas,

De motores en marcha,

Con olores penetrantes,

Y vapores envolventes.

Andenes

De sueños inconclusos,

De tristes despedidas,

De películas trágicas con finales infelices

Y bandas de sonido con oboes.

De lluvias tenues,

De muchacha solitaria

Envuelta en un chal

Azul o rojo

En la multitud abigarrada.

Andenes

De hombres que se marchan a la guerra

O

A la gran ciudad detrás de un sueño,

O no importa donde;

Siempre

Es lo de menos.

Andenes unidireccionales,

Nunca de regresos.

Solo de partidas.

Andenes de lágrimas y congojas,

Andenes dolorosos

De alma compungida.

Pequeño poema jurídico- Miguel Dorelo

Pequeño  poema jurídico- Miguel Dorelo

Tus ojos, tu piel,

Tu boca, tu mirada:

Asesinos por naturaleza,

Deberían ser juzgados sin contemplaciones.

Desearía ser fiscal, su señoría.

Y también defensor de oficio,

Pedir la pena máxima y

Aportar las pruebas

Que la absuelvan,

Apelar si fuese necesario.

Pero es sabido que

Como víctima fatal

El derecho no me ampara.

Cuando ella habla- Miguel Dorelo

Cuando ella habla- Miguel Dorelo

Ella dice:

El  Taj Mahal

Es una mierda.

Y también

La gran muralla.

Las pirámides de Egipto,

El Paternón

Y  todas y cada una

De las Grandes Obras de la Humanidad.

Egos exacerbados

Construyendo inmortalidad.

Sobre

Muerte

De pueblos sojuzgados.

Yo la miro en silencio.

Cuando dice esas cosas

Comprendo porque la amo tanto.

Amaneció lloviendo- Miguel Dorelo

Amaneció lloviendo- Miguel Dorelo

Hoy

Amaneció lloviendo

Como tantas otras veces;

Garúa fina,

Llanto de ausencia,

Tristeza húmeda

Y

Persistente.

Gotas caleidoscópicas

Reproduciendo

Infinitamente tus ojos

Y

Tu boca.

Amanecer desesperanzado

De miradas,

Sonrisas

Y besos.

Hoy,

Como tantas otras veces,

Amaneció lloviendo.

Tomaremos un café- Miguel Dorelo

Tomaremos un café- Miguel Dorelo

Cualquier día de estos

Tomaremos juntos un café.

No tomaré tus manos entre mis manos

Ni

Nos miraremos a los ojos.

Solo

Te preguntaré como andás

Y

Me contarás

Exactamente

Lo que puedas,

Y te contaré

Seguramente

Lo que quieras.

Un día de estos

Tomaremos juntos un café,

El último…

O

El a cuenta

De otros más.